Te toca hablar en público y la tensión comienza a subir: la fecha de la presentación del proyecto se acerca a pasos agigantados. En este artículo hemos preparado algunos consejos sobre cómo hablar en público.
Has cuidado cada detalle de tu informe, de tu presentación. Sin embargo, eres un manejo de nervios ante la idea de encontrarte solo ante tu jefe.
Tienes miedo de tartamudear, tropezar con tus propias palabras… las palmas sudorosas, la boca seca y los miedos se abren paso en el momento en que tienes que hablar en público.
8 consejos para hablar en público
Ya sea para una presentación importante en una reunión semanal o un discurso, pocas personas realmente se siente cómodas cuando les toca hablar en público.
No abuse de muletillas
Antes de hablar en público, memorice en la medida de lo posible y repite su discurso. Esto le permitirá identificar si usas o no muletillas. Regularmente puntuamos nuestras oraciones “por tanto”, “bueno”, “digo”, “si quieres”, “ie”, “aquí”, “y…”, “mmm…“, etc. Estas repeticiones suelen ser una manera de tranquilizarnos y darnos a nosotros mismos tiempo para reflexionar. Pero con el tiempo cansará a su audiencia rápidamente, incluso es probable que tu público se centre más en el uso de las muletillas que en tu mensaje (recuerdo un profesor al que contábamos los “mmmm” que hacía en clase).
Por lo tanto, trate de concentrarse para deshacerte de estas muletillas y reemplácelas con breves momentos de silencio, durante los cuales se puede dar la impresión de que estás recuperando el aliento o marcas un momento de reflexión.
Evite gestos inapropiados
En un discurso, el lenguaje corporal es tan importante como el mensaje verbal que queremos hacer llegar. Cada gesto tiene su importancia y el simbolismo. Evite cruzar sus brazos, un signo de cierre, la caída de su hombro, que da una actitud culpable, o un gesto gesto asociado a la insatisfacción. Controle la comunicación no verbal en el momento de hablar en público.
Además, asegúrese de que sus acciones son consistentes con su audiencia: si usted está hablando en público ante un grupo pequeño realice gestos simples, pero puede amplificarlos (sin exagerar y hacer teatro) ante una gran audiencia .
Limite el uso de conceptos técnicos y frases hechas
Todos sabemos que hay una serie de fórmulas que triunfan cuando tenemos que hablar en público en la empresa: “factor de éxito”, “estrategia ambiciosa”, “plan de acción”, “estar a la vanguardia”, “ser actor esencial”, “imponerse como la referencia del mercado“, etc. Estas fórmulas, a fuerza de ser repetidas, pierden su significado. Reducen al mínimo el impacto de su discurso y corremos el riesgo de vaciar de sentido las otras declaraciones.
Asegúrese de centrar su discurso en los hechos y mantener la eficacia de lo que tiene que decir.
Evite resultar monótono
Antes de hablar en público frente a todo el mundo practique en casa. Imagine una gran audiencia y trate de hacerle comprender a la última fila sus argumentos. Mida el alcance de su voz. No dude en hablar y articular.
No le importe que resulte un poco teatral. Inhibir el estrés puede servir para llegar en mejores condiciones en el momento de la presentación.
Juegue con el tono, desde graves a agudos, acelere y rompa su discurso. Resalte las palabras que usted piensa que son importantes; tener en mente las palabras clave del discurso le ayudarán a no perder el hilo.
Limite los sobrentendidos
Supongamos (a menudo sin fundamento) que el público ante el que va a hacer la presentación no tiene control sobre el tema, al menos tanto como usted.
Sin pensar que tiene a un público completamente ignorante delante, comience su intervención recordando algunos aspectos destacados, que ayudarán a entender su posterior desarrollo.
Tenga en cuenta también la posibilidad de adaptarse a su público, trate de empatizar con su audiencia y hágase preguntas sobre cómo seguirán su discurso.
No se lance a un soliloquio
Si se da cuenta de que la audiencia está cansada, la gente empieza a hablar con los compañeros, hay susurros, bostezos, o la gente mira el reloj o el teléfono móvil; trate de recuperar su atención.
Puede cambiar el tono o el ritmo. Cuente una historia. También puede organizar una interacción directa con el público lanzando una pregunta, incluso puede lanzarse a una pequeña sesión de preguntas y respuestas. Hablar en público implica tener cierta sensibilidad para con tu audiencia.
Manténgase alejado de las notas
Las notas deben ser una manera de recordar los puntos que usted debe recordar. Idealmente, usted debe preparar hojas, con las que sólo reanudar los elementos esenciales de su discurso y ayudarle a seguir una determinada línea de tiempo.
Si tiene miedo de perder el hilo, sin embargo, puede llevar con usted el texto de su intervención. Pero sólo debe ser un medio para tranquilizarle para un “por si acaso” . No debe ser la fuente de su atención mientras habla en público. Lo mismo para las presentaciones en powerpoint. Se pretende ilustrar su discurso, no monopolizarlo con los ojos.
En todos los casos, al hablar en público es esencial mantener un contacto visual casi constante con la audiencia.
En grupos pequeños, deberá echar un vistazo regularmente a todos los miembros que lo componen. Si usted lanza un discurso ante una gran audiencia, haga barridos completos, mirando de izquierda a derecha y de arriba a abajo, para tener contacto visual con toda la audiencia.
Evite el lenguaje escrito para hablar en público
El lenguaje escrito es muy diferente de la lengua hablada. Es lo que pasa con los escritos, no pueden utilizarse directamente sobre la audiencia.
Debemos adaptar nuestro estilo. Evite frases enrevesadas, palabras complicadas. Sea breve y utilice frases cortas, con una sintaxis clara y precisa. Piense en la eficiencia de su mensaje antes de comenzar a hablar en público.