Una auditoría contable, también conocida como auditoría financiera, es el proceso mediante el cual se revisan las cuentas anuales de una persona jurídica. Los auditores de cuentas analizan la información financiera de las empresas para asegurar que todo lo que haya declarado la compañía coincida con la realidad. Por otro lado, existen muchos tipos de auditorías distintas, como la auditoria de subvenciones o la auditoría de fundaciones. Además, estos procesos pueden realizarse obligatoria o voluntariamente. ¿Para qué sirve la auditoría contable?
¿Por qué es necesario hacer una auditoría contable?
lgunas empresas están obligadas a realizar auditorías contables periódicamente. Es el caso de las compañías que:
- Superan los 50 empleados
- Superan los 22 millones de euros netos en su cifra anual
- Superan los 11 millones de euros en activos
Sin embargo, muchas empresas deciden hacer auditorías voluntarias. Por lo general, estas compañías quieren demostrar cuál es el valor de la empresa a accionistas, clientes, inversores, proveedores o entidades financieras. En estos casos, el valor de la auditoría es externa. No obstante, realizar este procedimiento también tiene un valor interno. Se trata de los casos en los que la compañía realiza una auditoría contable para analizar cuál es su estado financiero y, en base a datos concretos, tomar decisiones estratégicas.
¿Cuáles son las ventajas de una auditoría contable?
La principal ventaja de una auditoría contable es que ofrece una imagen transparente de las operaciones de una compañía frente a terceros. Sin embargo, también es una herramienta valiosa para la empresa en sí, que puede tomar mejores decisiones en base a un análisis exhaustivo de sus finanzas. Las principales ventajas de realizar una auditoría contable son las siguientes:
- Permite realizar una mejor gestión de la contabilidad de la compañía.
- Detecta cualquier error o falla en las finanzas de la empresa de modo de que se pueda corregirlos antes de que se conviertan en un verdadero problema.
- Mejora los controles internos.
- Contribuye a dar a conocer el verdadero patrimonio de la empresa.
- Ayuda a detectar y prevenir fraude.
¿En qué casos es necesaria la figura del auditor?
En los casos voluntarios, muchas empresas eligen trabajar por su cuenta; sin embargo, un auditor estará más capacitado para realizar un trabajo fidedigno. Si se trata de auditorías obligatorias, el auditor debe estar inscripto en el ROAC, el registro oficial de auditores, para que el proceso y sus resultados tengan validez. De lo contrario, la auditoría no será efectiva ya que puede existir algún conflicto de intereses de la persona que realiza el proceso; por otro lado, los directivos también podrían presionarla para hacer caso omiso a determinada información. En todos los casos, lo más conveniente es contratar a un auditor registrado que garantice la transparencia del proceso.
Una auditoría contable es el procedimiento mediante el cual se revisan las cuentas anuales de una compañía. Así se realice obligatoria o voluntariamente, le aportan mucho valor a cualquier empresa.